Desde pequeñita trasteaba con la "lata"de costura de mi madre, ¿quién no ha tenido a modo de costurero esa maravillosa lata de galletas danesas? Sacaba aguja e hilo y a rebuscar por casa trozos de tela para hacer vestidillos a las muñecas que compartía con mis cuatro hermanas. Crecí y me di cuenta que mi parte creativa buscaba más, hasta que descubrí el maravilloso mundo de los tocados. Por eso quiero compartir con todos vosotros "Los tocados de la Miri".
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